El aire cálido derrite mi cuerpo
funde mis ideas mas frescas.
El viento ahoga mis gritos amargos
reseca mis lagrimas más húmedas .
En el fondo de mi alma escondidos
latiendo con fuerzas renovadas
surgen de nuevo sentimientos antiguos
con formas más nuevas.
De repente sin motivo aparente
me he dado cuenta del sentimiento latente.
Ya no me importa el aire, ya no me frena el viento
sólo el latir de mi pecho caliente
que no se detiene ante nada ni nadie.
Sólo mi alma sabe que pasa
en mi mente ahora que nadie me para